LA TRASTIENDA

A sólo 15 días de las elecciones PASO en todo el país, en Córdoba adquiere volumen político la disputa electoral entre las coaliciones que lideran el actual gobernador y el también actual ministro de Economía del gobierno nacional.

En tanto, mientras el variopinto de dirigentes de Juntos por el Cambio continúa lamiéndose las heridas por la durísima derrota en la ciudad Capital –que se suma a la de gobernador, en junio pasado-, al mismo tiempo procura ubicarse en las gradas de Horacio Larreta o Patricia Bullrich, para tratar de encontrar una sonrisa fresca el próximo domingo 13.

Un ojo en los votos, y otro en las encuestas

En una revisión concienzuda, esta semana hemos chequeado y consultado sobre las fotografías circunstanciales que muestran las encuestas realizadas a lo largo y ancho del país, claro está, para tener si se quiere, mayor precisión sobre los acontecimientos políticos y electorales presentes, y de los próximos días.

En general, en las consultoras de rodaje nacional, hay ciertas coincidencias sobre el panorama actual. Unión por la Patria, con la precandidatura de Sergio Massa, estaría asegurando el tercio de votos históricos que ostenta el Justicialismo. Junto con la precandidatura de Juan Grabois, que alcanzaría 5%, la oficialista UPP, cosecharía en éste primer turno, un 30% de los votos nacionales.

Algo similar se observa en los gráficos de los encuestadores, cuando se les consulta sobre la opositora JXC, pues también estarían próximos al tercio de los votos. No obstante, aquí el contexto ubica un complejo cuadro altísima tensión dada la feroz disputa entre los precandidatos, Bullrich y Larreta.

Más atrás, por debajo de la línea de 20 puntos, aparece el disruptivo de la derecha, Javier Milei, que lejos de consolidarse, presenta oscilaciones con perspectivas negativas sobre su performance electoral final.

Con una magra cosecha, que proyecta y pronostica una pobre presencia electoral, aparece el gobernador Schiaretti, que de momento, apenas rozaría los 4 puntos en tal elección.

Tomar recaudos

Obviamente que todos los datos se toman con los debidos recaudos, a saber: las encuestas y los encuestadores han fallado en un sinnúmero de ocasiones, en elecciones nacionales y elecciones provinciales o locales. Por caso, alcanza recordar que hace sólo una semana, ningún relevamiento dudaba siquiera en dar ganador al radical-macrista Rodrigo De Loredo en Córdoba Capital. ¿El resultado final? Conocido, ganó el peronista Daniel Passerini, por casi 8 puntos. Pero, desde el plano técnico, crece una limitación en los dispositivos, también a saber: primero, las encuestas telefónicas automáticas, cada vez, proporcionan mayores márgenes de error; segundo las telefónicas con encuestadores presentes, recogen serias evasivas (cuando no mentiras) de los ocasionales interlocutores; y en tercer término, las presenciales en el territorio son las realmente efectivas, pero además de ser muy costosas, demanda mucho esfuerzo, pues cada 5 domicilios, apenas 1 accede a responder.

Así las cosas, recalcamos en la importancia de contar con relevamientos, pero a sabiendas que sólo constituyen un instrumento más para el mejor abordaje posible de una campaña electoral.

El difícil sprint final de Schiaretti

Volviendo a Córdoba, la oficialista provincial Hacemos Unidos por Córdoba, quiere asegurar un triunfo en la provincia en las próximas primarias. Con la escudería Hacemos Unidos por Nuestro País, la estrategia apunta a asegurar un piso de 20 a 22 puntos, para ir a octubre a pelear por más de 25 puntos y asegurarse tres diputados nacionales.

La tarea, no parece nada sencilla para Juan Schiaretti y los suyos. Por un lado, porque la interna de Juntos acapara alta atención electoral en la provincia, dada la tradición de arrastre de votos que la coalición ha cosechado desde 2015 a la fecha, y por el otro, por la irrupción de la precandidatura de Sergio Massa, con Unión Por la Patria, que tiempo atrás supo ganar cierto predicamento por estas benditas tierras cordobesas, cuando compartió escenario con el recordado José Manuel de la Sota.

En el edificio de El Panal, la estrategia electoral saca punta al poroteo de los votos peronistas. Sobre todo en el interior de la provincia, donde hay un importante descontento del Justicialismo tradicional con la actual conducción provincial, con fundamentos que hacen mella en los despachos de la Capital.

Alcanza nombrar que no son pocos los intendentes que tienen entre las facturas pendientes, el rechazo de Schiaretti a garantizar la reelección indefinida de mandatarios locales que, ante tal negativa, se vieron obligados a “promover” candidatos impensados, y en muchos casos, terminaron perdiendo sus elecciones comunales.

También, hay una lista extensa de dirigentes que se “hartaron” del recurrente maltrato político del schiarettismo, de hace varios años a esta parte, coronando tal actitud en las pasadas elecciones del 25 de junio último.

El hombre señalado es Carlos Gutiérrez, el riocuartense y diputado nacional de máxima confianza del gobernador, y que justamente, encabeza la lista de precandidatos a legisladores nacionales por Hacemos.

Massa arma juego en serio

Con ese complejo escenario, la flamante mesa política que alumbró Massa en la provincia, ya trabaja en articular encuentros y conversaciones con esos intendentes y dirigentes del PJ del interior que ventilan a los cuatro vientos, que ya no le deben nada a Schiaretti.

Por caso, el ministro y candidato del peronismo nacional, envió a la Capital provincial, a Juan José Álvarez, a juntar los principales referentes del oficialismo nacional en la provincia. Por eso, Juanjo Álvarez, ex ministro de Justicia de Eduardo Duhalde, y hombre de confianza de Massa, se reunió la semana pasada con intendentes como Fabián Francioni, de Leones, y Martín Gill, de Villa María, y los precandidatos de la lista de diputados, entre otros, para acordar una agenda de trabajo para los 15 días que restan de campaña.

Los datos más salientes: todas y todos coincidieron en que se debe hacer el esfuerzo para superar la barrera del 10% de los votos en Córdoba. Si eso se logra, se podrá pensar en un crecimiento significativo para las generales de octubre, y proyectar la posibilidad de pelear dos diputados.

Y un segundo aspecto, radicó en que la presencia de Massa en Córdoba, tendrá mayor relevancia en la semana previa al domingo 13, ya con más fortaleza del sector en todo el territorio cordobés.

En ese esquema, en el centro y sur de la provincia, está trabajando un equipo del precandidato Martín Toselli, intendente de Bulnes, que ganó su elección en la localidad, ocupa el cuarto lugar en la lista de UPP Córdoba, y en los últimos 10 días, ya recorrió más 40 ciudades y localidades de los diferentes departamentos.

Córdoba, con su 8,3% de representación electoral en la torta nacional, será crucial en las aspiraciones de todos los precandidato presidenciales. Se sabe, de las prioridades del oficialismo provincial, también del interés de Juntos por el Cambio. Pero, probablemente, la novedad radica en la creciente decisión política del peronismo nacional, a través de su coalición UPP, de poner pie en serio en ésta provincia, por primera vez, en más de una década.