El Presidente electo se esforzó durante toda la semana por hacer equilibrio entre las presiones del PRO por colocar a su gente en la mayor cantidad de casilleros del Estado, y la presión de su propio partido, LLA, que pugnaba por que sus allegados desembarcaran en los lugares clave.

Las tensiones para la conformación del futuro Gabinete nacional dominaron la primera semana posterior al balotaje que consagró a Javier Milei como Presidente electo, con pujas entre el PRO y La Libertad Avanza (LLA) para la designación de funcionarios que integrarán el elenco ministerial.

En paralelo, la liga de gobernadores de Juntos por el Cambio (JxC) se afianza como el espacio político de la coalición opositora que busca ser el contrapeso del nuevo Gobierno.

El Presidente electo se esforzó durante toda la semana por hacer equilibrio entre las presiones del PRO por colocar a su gente en la mayor cantidad de casilleros del Estado, y la presión de su propio partido, LLA, que pugnaba por que sus allegados desembarcaran en los lugares clave.

Milei comenzó a conformar el gabinete con el criterio de intentar hacer justicia con quienes lo ayudaron a llegar hasta la Casa Rosada.

En ese sentido, el PRO logró la casi segura designación de Patricia Bullrich como ministra de Seguridad, mientras que el sector del PJ cordobés referenciado en Juan Schiaretti recibió como una señal de aval y reconocimiento por parte de Milei la designación de Osvaldo Giordano como titular de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses).

En ese puesto, Milei pensaba colocar inicialmente a Carolina Píparo, quien incluso llegó a anunciar una reunión de transición en ese organismo con la presidenta saliente del organismo, Fernanda Raverta, encuentro que nunca llegó a concretarse.

En un contexto en el que muchos de los principales puestos del Estado están aún por revelarse, sobre todo a nivel ministerial, fuentes del PRO indican que es probable que los nombres cercanos a ese partido no aparezcan quizá en las primeras líneas de Gobierno, o sea a nivel ministerial, pero sí ocupen cargos en segundas o terceras líneas, es decir Secretarías o Subsecretarías de Estado, además de Direcciones Nacionales.

Una importante fuente de PRO aclaró a esta agencia que «no es que Milei quiera designar a mucha gente que trabajó con Macri porque sí», sino que el mandatario electo reconoce que «muchas personas que tienen experiencias concretas en lugares del Estado«, a partir de su participación en la gestión 2015-2019.

Esos exfuncionarios, que cuentan con ese bagaje de experiencia, «además piensan como Milei», destacó la fuente.

Si bien el llamado ‘Pacto de Acassuso’ (por la cena en la casa de Macri que selló el apoyo al libertario del PRO y de Patricia Bullrich poco después de la primera vuelta electoral) se trató de un acuerdo «sin condicionamientos», según plantean las mismas fuentes, también está claro que Milei pidió en esa reunión un aporte de técnicos y funcionarios para que lo acompañen en su gestión.

Los nombres del PRO que circularon mediáticamente para ocupar cargos -Luis «Toto» Caputo en Economía, Luis Petri en Defensa, Patricia Bullrich en Seguridad, Federico Sturzenegger en Modernización-, entre otros que corrieron durante la semana, generaron una fuerte disputa entre Milei y las bases libertarias.

En el espacio del libertario no quieren que la sociedad perciba que Macri está detrás de la mayoría de las designaciones.

Durante la semana también salieron a expresar su posición ante el nuevo Gobierno los diez gobernadores electos por JxC, quizás el único espacio institucional donde todavía la coalición siga teniendo cierta unidad.

La mesa nacional de la coalición sigue sin reunirse desde que Macri y Bullrich pactaron su acercamiento a Milei a fines de octubre y el espacio que conforman los mandatarios provinciales se convierte, hoy por hoy, en el único ámbito de debate interno.

De hecho, los gobernadores de JxC se reunirán este martes con los diputados y senadores actuales y los próximos a asumir, en un encuentro previsto para el mediodía de ese día en el club de Equitación, ubicado en el barrio porteño de Palermo.

Este núcleo de gobernadores, que Milei necesitará como respaldo político e institucional para su gestión, se manifestó tanto para expresar su respaldo al nuevo Gobierno como para marcarle la cancha.

«Nuestra decisión es la de construir a la gobernabilidad de la Argentina, pero también sabemos que parte de nuestro rol es controlar la gestión del futuro Gobierno», indicaron los mandatarios electos a modo de advertencia.

El texto fue firmado por Jorge Macri (CABA); Leandro Zdero (Chaco); Ignacio Torres (Chubut); Gustavo Valdés (Corrientes); Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Carlos Sadir (Jujuy); Alfredo Cornejo (Mendoza); Marcelo Orrego (San Juan); Claudio Poggi (San Luis) y Maximiliano Pullaro (Santa Fe).

Se trata de un grupo heterogéneo, ya que allí conviven las distintas líneas del PRO y la UCR, pero unido por el mismo objetivo: respaldar a Milei aunque sin darle un cheque en blanco, y negociar fondos para sus provincias a cambio de respaldo legislativo, según lo recogido por esta agencia de fuentes que estuvieron al tanto del encuentro.

Los mandatarios provinciales de JxC que se reunieron esta semana agregaron que pretenden «ser tomados en cuenta por el Gobierno electo a la hora de definir políticas que afecten la gobernabilidad de nuestros distritos».

Una de las personas que estuvo en la reunión comentó que «los gobernadores quisieron decir que Milei no se corte solo, que lo van a respaldar pero en la medida que él abra un canal de diálogo y las cosas estructurales se hagan por consenso».

Fuente: Télam