El gremio de los educadores tuvo este martes el primer encuentro con representantes del Gobierno provincial. Desde el sector salud desconocen la representatividad del SEP y piden una paritaria específica.

La segunda mitad de febrero marcó el inicio de negociaciones paritarias entre distintos sectores de trabajadores estatales y el Gobierno provincial, que los convocó para el debate en la mesa bilateral prevista por ley. Este lunes 14 hizo punta el Sindicato de Empleados Públicos (SEP) y este martes la Provincia recibió a representantes de la la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC), que plantearon sus demandas en una mea de negociación que en todos los casos está, apenas, dando sus primeros pasos. La Unión de Trabajadores de la Salud pide a su turno una paritaria específica para el sector.

Con la inflación anual de 2021 en el orden del 50%, una proyección anual similar para 2022 y los datos preocupantes del aumento de precios durante el enero pasado, la pretensión de los gremios estatales pasa por lograr incrementos que eviten el atraso salarial y al menos «empaten» el costo de vida.

Así lo dejó en claro la dirigente de Uepc Zulema Miretti, quien apenas salió del encuentro con los paritarios del Gobierno ratificó la pretensión gremial de «recuperar los puntos que se perdieron el año pasado, teniendo en cuenta que nosotros tuvimos un aumento del 45,5% y la inflación fue de aproximadamente el 50%».

La Secretaria General Adjunta del gremio indicó que «en este proceso inflacionario que estamos viviendo creemos que la negociación no puede ser anual, deben establecerse tramos», y precisó que en este primer encuentro con el Gobierno no se avanzó la especificación de esos tramos ni en porcentajes de aumentos concretos.

UTS pide pista

Como ha ocurrido otros años, sectores de la salud piden una mesa de negociación específica. La Unión de Trabajadores de la Salud señaló este martes en un comunicado de prensa que «los últimos acuerdos salariales firmados por la conducción oficialista del SEP fueron totalmente insuficientes» y que en los últimos dos años «nuestros salarios aumentaron un 17% menos que la inflación».

UTS consideró que «una vez más el gobierno discrimina a los gremios representantes de la salud y convoca a la conducción oficialista del SEP» y reclamó «una paritaria específica de salud, como ya existe en muchas provincias». El gremio pretende que ningún trabajador del sector tenga un salario menor a la canasta básica, que calculó en $85 mil, el pase al básico de sumas no remunerativas y la incorporación a planta permanente de los empleados precarizados.

Fuente: La Nueva Mañana