Este 1° de Mayo, la localidad volvió a recibir a todos sus fieles en una nueva edición de la Fiesta en honor al Cristo de la Buena Muerte. En la oportunidad, se desarrolló la tradicional misa de las 10 de la mañana, oficiada por el Obispo de la Diócesis de Río Cuarto, Adolfo Uriona, quien en la homilía de este año manifestó «su preocupación ante el dolor de los argentinos». Por estos días los obispos argentinos se reunieron en Asamblea plenaria y se reflexionó acerca de la realidad del país: «El 80% de la homilía fue la declaración que los obispos consensuamos en la Asamblea plenaria. Después de un intercambio que hicimos en la pastoral, y dijimos, tenemos que sacar una declaración acompañando a nuestro pueblo. Insisto, no somos expertos en diagnóstico, pero uno escucha y se da cuenta lo mal que está».