Fernando Martín Páez, secretario de STIA (Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación) en Villa María, denunció que la firma obligó a los trabajadores de la misma a tomarse las vacaciones de manera forzada. Señala que desde la empresa comunicaron que se debe a un sobrestock de productos.

Parecería que la crisis económica comienza a pegar más fuerte a uno de los sectores económicos más fuertes del país, el lácteo.

La planta de Nestlé ubicada en la ciudad de Villa Nueva, provincia de Córdoba, cerrará durante el mes de marzo, obligando a que todos sus trabajadores se tomen vacaciones en ese período de tiempo, sin tomar en cuenta lo que ellos tuvieran planeado.

Fernando Martín Páez, secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (STIA), Seccional Villa María, le expresó a El Diario del Centro del País (eldiariocba.com.ar) en una entrevista la situación acontecida:

“La semana pasada nos desayunamos con la noticia de que la fábrica de Nestlé Villa Nueva, que está enfrente del barrio Ctalamochita -no confundir con la planta de la avenida Carranza como algunos han dicho, que es Santa Clara- en marzo va a estar parada, por ende le van a dar vacaciones a todos los trabajadores”, señaló.

El gremialista expresó que repudian esta situación “porque siempre el ajuste lo pagan los trabajadores, y es que según ellos paran porque están sobrestockeados de productos, pero bueno, si es así, les diría que salgan a venderlo más barato, no sé, pero siempre el ajuste lo pagan los trabajadores. Porque si pasa cualquier cosita, que vacaciones o despidos”.

“Si bien no va a ver por ahora despidos,  es una situación que causa incomodidad y miedo en los trabajadores. Dicen que van a aprovechar para darle mantenimiento a la fábrica, que estaba programada para julio, lo que va en contra de las normas internas y lo que ellos llaman ‘las buenas prácticas’. Incluso el viernes pasado la jefa de Recursos Humanos andaba haciéndoles firmar las vacaciones a todos los trabajadores, lo cual consideramos que es una apretada de obligarlos a hacerlo sin tener la posibilidad de decir cuándo quieren hacerlo”, dijo.

En este sentido, denunció que no es la manera de hacer esto “porque parece que les están diciendo ‘vos te las tenés que tomar sí o sí’, haciéndoles  firmar un papel. Porque además, de acuerdo a las normas internas, si vos pedís vacaciones tenés que llenar una solicitud a través de una plataforma digital, con todo un protocolo donde el jefe las tiene que autorizar, y ahora, porque ellos lo deciden porque sí, pasan por encima de su propio reglamento”.

“Esto no se debe hacer, de ser así, no es la manera, ya que va en contra las normas que ellos mismos tanto pregonan. Y esto, sin duda alguna, crea un clima laboral muy hostil, y muy enrarecido. Porque a raíz de todo esto, se crea una psicosis colectiva, y el trabajador tiene miedo, y es precisamente lo que ellos quieren hacer, meter miedo, porque a través del miedo precarizan el trabajo, y pretenden doctrinar a la gente, y luego te cambia el horario, salís de vacaciones cuando ellos deciden, entre otras cosas más”.

Páez, a su vez, no descartó que este sea el comienzo de una situación aún peor, porque como dijo “aunque no ha habido despidos, en un contexto económico como el que se vive, con una desocupación creciente, la posibilidad de que los haya no parecería lejana”.

Fuente: https://www.todoagro.com.ar/