Por Guillermo Ricca. Dr. en Filosofía 

El diario británico Financial Times, en una nota reciente, llega a la siguiente conclusión respecto a la economía argentina: «El problema de Argentina no fueron los ´70 años de Peronismo´, sino los ´120 años de Oligarquía´». La frase es de Alan Beattie, ex economista del Bank of England y hoy editorialista del prestigioso periódico inglés.

En su libro “Falsa Economía: una Sorprendente Historia Económica del Mundo”, Beattie se pregunta por qué Argentina no fue EEUU y su respuesta es simple: mientras EEUU repartió la tierra en parcelas pequeñas, Argentina se la dio a unas pocas familias. “EEUU favoreció a colonos usurpadores, Argentina a terratenientes”. El resultado inmediato fue que mientras en EEUU la poca tierra obligaba a innovación para optimizar y mejorar ganancias, al latifundio argentino le alcanzaba con vacas, ovejas y alambre de púa. “Las economías rara vez se hacen ricas solo con agricultura, Gran Bretaña había mostrado el camino: industrialización” pero “las élites argentinas rechazaron la industrialización para seguir mamando de la teta de la explotación agropecuaria latifundista”, dice Beattie.

El Pacto de mayo, firmado en julio—en realidad una mascarada, un circo más de este gobierno bufo—es un retorno de ese proyecto de país que atrasa un siglo y medio, al servicio de los intereses de los poderes coloniales de las finanzas. Como todos los proyectos de la oligarquía—la expresión es de Financial Times—incluye el odio a todo lo que no sean ellas mismas. La oligarquía argentina se caracteriza por el desprecio hacia las mayorías en tanto que los bienes que ella disfruta como clase, no puede imaginarlos sino como exclusivos y merecidos, cuando en realidad son herencia de conquistas realizadas en base a genocidios. No uno, varios. En una entrevista del año 2002, realizada por Graciela Speranza y Marcelo Cohen, Germán García responde acerca de los asesinatos en las protestas de diciembre de 2001 y sobre cierta repetición del sacrificio en la historia argentina. Dice: “Hasta Ramón Doll, el nacionalista, decía que los mismos que trajeron a los europeos para sustituir a los indígenas que habían matado, inventaron la Ley de Residencia para poder librarse de los europeos que no les gustaban. Esa es la estructura sacrificial del país.

Hay una frase que confirma esta idea: el famoso “Gracias a…” Gracias a María Soledad nos enteramos que en las provincias hay estructuras feudales. Gracias a Carrasco se suprimió el servicio militar. Gracias a Cabezas nos enteramos de que había una mafia. Gracias a Malvinas…y así. Sabemos perfectamente que los militares pueden matar a cincuenta Carrascos y no por eso se va a eliminar el servicio militar sino hay una decisión previa. Gran parte de los razonamientos y de las operaciones retóricas tienen una función de creación homeostática de la buena conciencia y no una función de explicar cosas. Esto es lo que yo llamo estructura sacrificial”. Más de lo mismo.