El flamante ministro habló en el microcine de Hacienda y dio un mensaje para los mercados. No anunció medidas pero ratificó el ajuste y adelantó que su objetivo primordial es contener al dólar. «No hace falta un tipo de cambio más alto», aseguró. Dijo que se reunirá con referentes económicos de la oposición.
El flamante ministro de Hacienda, Hernán Lacunza , dio este martes un mensaje dirigido a los mercados más que a la población. Garantizar el ajuste y las pautas fiscales acordadas con el Fondo Monetario, limitar la volatilidad del tipo de cambio a los actuales niveles, los cuales que consideró que son los suficientemente elevados, y “subordinar” el resto de las variables a esos dos objetivos fueron las claves crípticas del discurso del ex ministro de Economía bonaerense.
“Esa es la plataforma que queremos construir para la transición a un nuevo mandato. Con cuentas claras y estables, tipo de cambio competitivo, tarifas ya corregidas, implementación de obras para mejorar la productividad, generarán pilares solidos institucionales”, afirmó Lacunza. El funcionario adelantó que se iniciaron conversaciones con los referentes económicos de los principales partidos políticos opositores, en especial los que sacaron mayor ventaja en las elecciones primarias.
En un breve discurso antes de la apertura de los mercados, el ministro recién asumido –al igual que continuó en su alocución el presidente del Banco Central, Guido Sandleris—, dejó claro que el objetivo es estabilizar el tipo de cambio y llamar a un consenso con economistas de la oposición para una transición ordenada.
“Tenemos razones para pensar que después de la escalada de la semana pasada, el tipo de cambio está largamente por encima de su valor de equilibrio, que balancea la relación comercial y financiera de la Argentina con el mundo. Así lo establece el consenso de la mayoría de los analistas y como lo manifestó el candidato que más votos obtuvo en la última elección: no hace falta un tipo de cambio más alto”, afirmó Lacunza en la conferencia de prensa que ofreció en el Microcine del Palacio de Hacienda.
“Por eso, cualquier presión alcista no va a responder a cuestiones reales y no vale la pena remar contra la corriente”, agregó el ministro. Esta declaración dio la idea de que habría un política más restrictiva en la compraventa especulativa de divisas. Sin embargo, el titular del Central confirmó que seguirá el actual esquema de intervención sobre el tipo de cambio.
Lacunza había iniciado su exposición reconociendo que los saltos alcistas del dólar son “nocivos para la economía y el bienestar de la población” y que “permitir mayor volatilidad sólo agregaría incertidumbre y presiones inflacionarias a una inflación que venía en tendencia descendentes para el mes en curso”. “Pero ahora tendrá algún escalón adicional a una inflación ya demasiado elevada”, agregó.
En la tan esperada exposición no hubo referencia a ninguna medida que permita controlar el pass through (traslado a precios internos) de la devaluación. Por el contrario, el mensaje fue de calma a los mercados, ya que se promete y asegura mantener los acuerdos con el FMI.
Fuente: Página 12