La inversión es parte del Plan Integral de Restauración Ecológica, presentado hoy por el gobernador Martín Llaryora. La iniciativa oficial apunta a conservar lo que se encuentra en buen estado, reforestar con flora nativa los ambientes dañados y controlar especies exóticas invasoras. La medida impulsa la generación de empleo verde, a través de la forestación, monitoreo de supervivencia de lo forestado, de control de exóticas, de protección de los bosques y pulmones, entre otras acciones.
En un acto desarrollado en el Salón Auditorio del Centro Cívico del Bicentenario, el gobernador Martín Llaryora encabezó ayer el lanzamiento del Plan Integral de Restauración Ecológica de Córdoba (PIRE). Acompañado por guardaparques y referentes de instituciones ligadas a la conservación ambiental, el mandatario provincial trazó los ejes de la iniciativa que consta de tres premisas fundamentales: conservar lo que se encuentra en buen estado; reforestar con flora nativa los ambientes deteriorados, para que se genere la sucesión natural que trae aparejada introducir vegetación nativa; y controlar las Especies Exóticas Invasoras que degradan los ecosistemas.
Para ello, el Gobierno de Córdoba destinará 100 millones de pesos para impulsar proyectos de restauración, con recursos que provienen del plan de Remediación Ambiental Posfuego anunciado oportunamente por el gobernador Martín Llaryora. Cabe señalar que es la primera vez que el Estado provincial invierte fondos para la producción de flora nativa y mejora en las capacidades del cuidado de la fauna.
El gobernador agradeció especialmente el trabajo articulado entre el Ministerio de Ambiente y Economía Circular en conjunto con organizaciones e instituciones vinculadas al cuidado del ambiente.
En este sentido, cabe remarcar que el PIRE trabajará de forma conjunta con más de 150 organizaciones, empresas y productores desarrollando acciones de impacto ambiental, al tiempo que producirá conocimiento científico y datos para la toma de decisiones públicas y privadas.
De esta manera, el Plan Integral de Restauración Ecológica de Córdoba impulsará la generación de empleo verde, a través de la forestación, de monitoreo de supervivencia de lo forestado, de control de exóticas, de protección de los bosques y pulmones, de producción de hierbas aromáticas, de huerta, entre otras.
Llaryora reafirmó el compromiso de “defender el planeta y generar acciones que bajen el calentamiento global” y agregó que “defender nuestra fauna y nuestra flora, es defender nuestra cultura”.
A su turno, la ministra de Ambiente y Economía Circular, Victoria Flores, sostuvo que “este programa es una nueva oportunidad, pero también una decisión política de pensar a Córdoba como una provincia verde. No nos da igual tener cualquier tipo de ambiente. Y esto no va en contra de ser una provincia que se desarrolla y genera empleo, sino que estamos para buscar un punto de equilibrio. No hay otra provincia con una política decidida de trabajar el cambio climático y la restauración ecológica”.
Apoyo para dar impulso a proyectos de restauración
En la oportunidad, se entregaron aportes a 11 viveros productores de flora nativa y 2 centros de rescate de fauna silvestre. En el primer caso, se trata de 5 viveros de Alta Producción, que recibieron 10 millones de pesos cada uno; y 6 de Media Producción, que recibieron 5 millones de pesos cada uno.
En cuanto a los Centros de Rescate, se vieron beneficiados el Centro Carayá con 10 millones de pesos para su plan de prevención y evacuación ante incendios; y la Reserva Tatú Carreta con 3 millones de pesos por ejemplares de fauna rehabilitados de lesiones ocasionadas por el fuego.
Ignacio Carle, miembro de Forestando Córdoba, valoró el programa y aseguró que “con el acompañamiento de la Provincia, vamos a poder duplicar la producción de árboles nativos anual, plantando así 160 mil especies en todo el territorio cordobés. Que el gobernador este presente en este tipo de iniciativas nos da mucha confianza y tranquilidad, nos hace saber para dónde va Córdoba en materia ambiental”.
«Córdoba es la única provincia del país que formula programas tan complejos sobre el ambiente. Agradezco que sea así porque me hace sentir protegida y acompañada para continuar con nuestro accionar como fundación», agregó Alejandra Juárez, fundadora del Proyecto Carayá.
A su vez, Elisa Sosa, presidenta de la Fundación Manos que Tejen Bosques, expresó: «Ver a una gestión que se involucra en iniciativas de cuidado ambiental y que dialoga en conjunto con nuestras organizaciones nos llena de esperanza para seguir trabajando». Estuvieron presentes, además, el presidente de la Fundación Banco de Córdoba, Paulo Cassinerio; el presidente de la comisión de Ambiente de la Legislatura, Abraham Galo; entre otros.