Ante la decisión unilateral de una empresa de aplicar un incremento salarial considerado arbitrario e insuficiente, la Organización Gremial Telepostal ha decidido no suscribir al acuerdo propuesto. El sindicato califica de «inaceptable» el reemplazo de negociaciones paritarias libres por disposiciones que consideran caprichosas y mezquinas, lo que dificulta un diálogo efectivo sobre los índices salariales.

El gremio subraya que el actual contexto económico del país ha debilitado significativamente el poder adquisitivo de sus afiliados. Aseguran que, a pesar de sus esfuerzos por mantener la calidad de los servicios brindados, la alta inflación ha llevado a que la mayoría de los trabajadores no pueda cubrir la canasta básica familiar. Según sus cálculos, el salario real se ha devaluado un 80% a lo largo de 2024, enfrentándose a una oferta de incremento del 2.7% en un contexto donde se estima que la inflación del primer trimestre alcanzará el 7%.

La organización ha manifestado su compromiso durante un período de transformaciones dentro de la empresa, destacando que, a pesar de que CORASA ha reportado superávits desde mayo del año pasado, la paciencia de los trabajadores se ha agotado.

En respuesta a esta situación, el sindicato ha delineado un cronograma de lucha que incluye varias acciones planificadas: un estado de alerta y asambleas en los lugares de trabajo a partir de hoy martes 1 de abril, un paro de 24 horas el 8 de abril, seguido de una asamblea y movilización el 9 de abril, y un paro general de 24 horas convocado por la CGT el 10 de abril.

El gremio ha instado a sus afiliados a mantenerse unidos, solidarios y atentos a las novedades futuras, reafirmando que no permitirán que amenazas o intentos de infundir temor afecten su firme postura en defensa de sus derechos laborales.