Con el aula magna repleta de público, se concretó este lunes el acto de asunción de Germán Gustavo Barros, como nuevo decano de Ciencias Exactas, Físico-Químicas y Naturales. Asumió junto a la flamante vicedecana Cintia Elizabeth Paisio. Tienen mandato hasta el 4 de mayo de 2027.

Tras el Himno Nacional, se dio lectura a la resolución 6 de la Junta Electoral de proclamación de decano y vicedecana de la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad Nacional de Río Cuarto, la cual luego fue entregada a las nuevas autoridades decanales por parte del presidente de la Junta Electoral, Jorge Miguel.

Seguidamente, se llevó adelante la tradicional firma del libro de actas. En este caso el acta de asunción de las nuevas autoridades de Ciencias Exactas fue firmada por el secretario general de la UNRC Jorge Miguel, la decana saliente, Marcela Daniele y los nuevos decano, Germán Barros, y vicedecana, Cintia Paisio, seguidos por la rectora de la UNRC, Marisa Rovera, y la vicerrectora, Nora Bianconi. Luego la rubricaron otros miembros de la comunidad universitaria.

La rectora y la vicerrectora entregaron el diploma a la decana saliente. También se entregó un diploma para Marisa Rovera, por haber sido decana en la primera parte de la gestión. El acto prosiguió con un emotivo momento. Fue cuando la rectora Rovera –que dejó el Decanato de esa unidad académica para hacerse cargo de la conducción de la UNRC- se estrechó un abrazo con Marcela Daniele –quien hasta entonces fue su vicedecana por dos mandatos consecutivos.

A continuación, Marcela Daniele expresó: “Y llego el día, este día que parecía que se alejaba, que no llegaba, con mandatos extendidos por más de un año, con una elección del rectorado de la UNRC, donde nosotros mismos impulsamos a nuestra por entonces decana, como candidata a rectora, y que hoy conduce nuestra UNRC…Y como equipo tuvimos que reorganizarnos, asumir otros roles, y seguir adelante. Y aquí estamos, lo logramos. Hoy es un día muy especial para la Facultad de Ciencias Exactas, Físico-Químicas y Naturales, porque en el pasado mes de abril, en una elección libre y abierta, donde todos los miembros pudimos participar y decidir quiénes conducirán esta Facultad, por este nuevo periodo”, señaló Daniele, quien se emocionó en varios tramos de su discurso.

Y destacó: “La Facultad de Ciencias Exactas, Físico-Químicas y Naturales es una institución que se caracteriza fuertemente por su participación activa, muy involucrada y en constante crecimiento. Se destaca por su solidaridad y compromiso con la formación integral que busca, genera y sostiene la igualdad de oportunidades en el acceso al conocimiento, por sus firmes posicionamientos, convicciones y accionar hacia el resguardo y defensa de la educación pública”.

La ceremonia fue presidida por la rectora Marisa Rovera, quien compartió el estrado del aula magna de la Facultad de Agronomía y Veterinaria con la vicerrectora Nora Bianconi; el secretario general de la UNRC, Jorge Miguel; la decana saliente Marcela Daniele; el decano entrante Germán Barros y su vicedecana Cintia Paisio. Participaron decanos, vicedecanos, consejeros directivos y superiores, miembros de la Junta Electoral, docentes, nodocentes, representantes gremiales de la Universidad, estudiantes y familiares de las nuevas autoridades de Ciencias Exactas.

“Nos preocupa la falta de una política pública clara en materia de ciencia y técnica”

La parte sobresaliente de la ceremonia ocurrió cuando el nuevo decano Germán Barros se dirigió a los presentes, desbordado de emoción. En tono crítico, expresó: “El escenario actual en materia política, económica y social de nuestro país en general y de la educación superior en particular, no es el más propicio para encarar la gestión de una unidad académica. Desde mucho tiempo, el presupuesto universitario ha sufrido una importante disminución, hasta el extremo de tener que funcionar con presupuestos reconducidos muy alejados de la realidad. A esto se le sumaron procesos inflacionarios atroces, que no solo impactaron en la universidad y su normal funcionamiento, sino que empujaron a un alto porcentaje de la población a la pobreza y a la indigencia con cifras vergonzosas y dolorosas como que 6 de cada 10 niños en Argentina son pobres”.

“Cierto es que en los últimos meses se aumentaron las partidas presupuestarias para las universidades, lo que permitió ajustar diversos rubros como los servicios, pero sigue sin considerarse la situación salarial de los trabajadores docentes y nodocentes universitarios, con varios cargos y dedicaciones que se encuentran por debajo del índice de pobreza. El desfinanciamiento del sistema científico tecnológico y de innovación impacta en el trabajo de los nutridos equipos de investigación, afectando no solo el avance del conocimiento científico, sino también el normal desenvolvimiento de las carreras de posgrado tan relevantes en nuestra unidad académica”.

“Poner el foco en la transferencia, relega a un segundo plano el aporte real de la producción de conocimiento para el mejoramiento de la calidad de vida de la sociedad en su conjunto”. “Lo que nos preocupa es, no solo el desfinanciamiento del Sistema Científico-Tecnológico, sino (y más grave aún), la falta de una política pública clara en materia de ciencia y técnica como generadora de conocimientos clave para el desarrollo de áreas estratégicas para el país”.

Barros: “Nos debemos una profunda autocrítica interna”

German Barros, quien ahora asumió como decano de la Facultad de Ciencias Exactas, comenzó su alocución diciendo: “Desde que tengo uso de razón, la Universidad ha sido parte de mi vida por la sencilla razón de haber tenido un padre nodocente y una madre docente e investigadora, con más de 40 años de trayectoria en ambos casos. Sin embargo, en los distintos estadios vitales, ni el niño que usó la universidad como espacio de juego, ni el joven que eligió Microbiología como carrera, imaginaron que esa misma persona iba a tener el honor de convertirse un día en decano de esta prestigiosa Facultad”.

Más adelante, señaló: “La Educación Superior debe ser una protagonista activa en la construcción de una sociedad más justa, inclusiva y con cohesión social. Pero para esto, no sólo debemos puntualizar los factores externos negativos, sino que nos debemos una profunda autocrítica interna, superar problemas fenoestructurales que aún persisten y diseñar nuevos contratos fundacionales y pactos académicos, acordes con los nuevos tiempos”.

Y agregó: “Es voluntad política de nuestro equipo de gestión defender a la educación pública, gratuita y de calidad, la igualdad de oportunidades en el ingreso, la inclusión y una mayor apertura a la sociedad formando parte activa dentro de cada comunidad y trabajar al unísono, para ayudar a superar las grandes brechas que aún las separan de ellas. Estamos ante un momento histórico, en el que está en juego el sostenimiento de uno de los pocos sistemas públicos, masivos, gratuitos y de acceso libre de Educación Superior en América Latina. Nuestras convicciones parten de un posicionamiento claro, la educación superior no es un servicio, es un bien público social, un derecho humano y universal y un deber del estado. Y como precisamente nosotros somos parte del estado, es nuestra obligación defender este derecho a la educación pública, gratuita y de calidad, no sólo desde lo discursivo y la lucha gremial organizada de todos los claustros, sino también refrendarlo a diario en hechos concretos, mostrando compromiso con la Institución en los distintos espacios de participación, exigiendo gestiones transparentes y proactivas que eviten la preservación del statu quo, que atiendan a la coherencia entre el discurso y la acción, haciendo coincidir la preparación científica con la rectitud ética”.

Cintia Paisio: “Empecemos esta nueva etapa con entusiasmo y determinación”
“Constituye este momento para mí el más desafiante y honrado destino que me ha tocado en mi vida profesiona. Tamaña responsabilidad me produce una profunda movilización emocional, afectiva e intelectual, pero también me lleva a una profunda reflexión sobre el camino que he recorrido y el que estoy por emprender”. Así comenzó su discurso la nueva vicedecana Cintia Paisio, a la vez que agradeció a su compañero decanal, a la comunidad de su Facultad, a la madre, marido e hijos.

Sostuvo: “El equipo saliente, junto con los precedentes, han dejado una huella indeleble, contribuyendo con su esfuerzo y visión a la construcción de una facultad sólida y respetada. Su dedicación y compromiso han sentado las bases sobre las cuales seguiremos construyendo”. Sobre el devenir en la Facultad, Paisio habló de “gestión abierta, inclusiva y flexible”, “la mejora continua a través de planificación y evaluación institucional”, “la necesidad de modernización y simplificación de sistemas administrativos”, “mejorar la distribución docente, nodocente y también la infraestructura y tecnología”, “promover la articulación con otras unidades académicas, acompañamiento de trayectorias estudiantiles, innovación curricular y creación de nuevas propuestas académicas, fortaleciendo la vinculación entre la investigación y el sector productivo, siendo la extensión una arista crítica que debe ser potenciada”.

Dijo que se vive “un contexto particularmente desafiante” y habló de “crisis económica” y “dificultades presupuestarias”. Sostuvo: “la defensa del presupuesto universitario será una de nuestros objetivos ineludibles”, a la vez que dijo que es necesario el “compromiso renovado respecto del trabajo interdisciplinario y colaborativo que permita optimizar recursos disponibles y potenciar las capacidades”.

Y siguió: “Debemos redoblar nuestros esfuerzos para asegurar que ningún estudiante se quede atrás debido a las dificultades económicas. Como vicedecana, mi compromiso es con cada uno de los integrantes de la Facultad. Mi puerta estará siempre abierta para escuchar sus ideas, preocupaciones y sugerencias. Juntos, podemos crear una Facultad que no solo sea un referente académico, sino también un lugar donde todos se sientan valorados y respetados, y que el gran sentimiento de pertenencia que normalmente nos inunda a muchos, sea un sentimiento colectivo”.

Germán Barros, quedó al frente de Ciencias Exactas, donde hubo lista única, junto con Cintia Paisio. El nuevo decano y su vicedecana sacaron 78,5 por ciento de los votos y hubo 21,5 por ciento de votos en blanco. Obtuvieron la mayoría absoluta ponderada de votos válidos emitidos, requisito para resultar electo en primera votación de acuerdo con el estatuto universitario.

Fueron proclamados el 30 de abril y tendrán –al igual que los restantes decanos y los nuevos consejeros estudiantiles electos- tres meses menos de mandato, puesto que así lo decidió a fines del año pasado el Consejo Superior, por única vez, para evitar la extensa transición que se viene arrastrando desde la postergación de las elecciones a causa de la pandemia.