En el marco del encuentro “¿Cuánta libertad soporta Argentina?”, organizado por el Centro de Estudios Civilitas y la senadora nacional por Córdoba Carmen Álvarez Rivero (PRO), dos referentes nacionales del pensamiento liberal, Agustín Etchebarne y Gabriel J. Zanotti, dialogaron en la capital mediterránea sobre libertad, economía y desarrollo como claves para el crecimiento de la Argentina, con la moderación de Sebastián García Díaz, presidente de Civilitas. Entre los temas abordados destacaron la libertad, la educación, el trabajo, la seguridad social, la economía y los impuestos y, por último, la batalla cultural.

El evento comenzó con las palabras de Álvarez Rivero, quien afirmó que “cuanta más libertad hay en las instituciones, más cerca se está de las soluciones de los problemas de la gente”, para a continuación proponer a la alfabetización inicial, uno de sus grandes temas de trabajo, como una forma de propiciar la libertad de las personas y, a largo plazo, el pensamiento crítico.

En los primeros momentos del diálogo, Gabriel J. Zanotti, doctor en Filosofía por la Universidad Católica Argentina (UCA) y miembro de la Academia Nacional de Educación, señaló que “la Argentina viene padeciendo una fuerte tradición estalinista, desde ideologías diversas, por lo que nuestro gran desafío es ser capaces de retornar a las libertades individuales”.

Agustín Etchebarne, economista, director general de la Fundación Libertad y Progreso y miembro del Instituto de Ética de la Academia Nacional de Ciencias Morales y Políticas, comenzó su intervención sosteniendo que la Argentina será un país más libre cuando “sea cada persona la que tome las decisiones que le conciernen”.

“El Gobierno tiene como doble objetivo resolver la quiebra del Estado, por una parte, y por otra desregular la economía con reformas estructurales”, añadió, para continuar afirmando que “ lo que se debe definir es con cuánta rapidez llevar a cabo esa tarea y cuál es el proceso”.

Al abordar el tema educativo, Zanotti afirmó que es necesario desmonopolizar el sistema educativo en todos los niveles, al tiempo que precisó que “eso hoy no es posible culturalmente, lo que sí es posible es volver a las mismas ideas de libertad de enseñanza que tenía Sarmiento”, afirmación con la que coincidió Etchebarne, al tiempo que se mostró “más pesimista con respecto a la batalla cultural en la educación, no en otros ámbitos, como la economía”, una educación a la que calificó de “muy deficiente” en la Argentina y aportó como evidencia de lo anterior “los pobrísimos resultados obtenidos por nuestros estudiantes en las pruebas PISA”.

Con respecto al tema del trabajo y, más en concreto, a la posibilidad de una reforma laboral, Etchebarne apuntó que “una parte ya se ha hecho, pero falta -entre otros factores- la eliminación del aporte sindical, lo que sin duda llevaría a los sindicatos a prestar un servicio realmente útil para los trabajadores”.

Zanotti, por su parte, también sugirió reformas estructurales en el sindicalismo, como la libertad de afiliación y la supresión del sindicato único por actividad, al que calificó como una “herencia de Mussolini, copiada por Perón”.

Al abordar el tópico de la seguridad social, la salud y la jubilación, Etchebarne afirmó que “la jubilación obligatoria es el principal mecanismo para impedir la salida de la pobreza”, a lo que Zanotti respondió argumentando que existe una gran dificultad cultural para abandonar ese modelo, “que es el miedo a la libertad”.

Con respecto a la economía y los impuestos, Etchebarne sostuvo que “es muy importante distinguir entre presión impositiva y recaudación, que no siempre van de la mano”, para añadir a continuación que “todas las instancias gubernamentales deberían reducir el gasto público, tal y como está haciendo el Gobierno nacional, también los gobiernos provinciales y los municipales”.

Por último, y a la hora de abordar la cuestión de cómo lograr una batalla cultural que pase de la resistencia al protagonismo, Zanotti concluyó su intervención insistiendo en el retorno de las libertades individuales, entre las que destacó la libertad de expresión, la religiosa y la educativa, y Etchebarne hizo un llamamiento a dar la batalla cultural en todos los ámbitos, no solo en la política o en la economía, haciendo uso del pensamiento crítico.

Fuente: www.civilitas.com.ar