Por JesĂşs Delgado. Director de Desarrollo Institucional de Transparencia Electoral.
Colombia celebra este año un proceso electoral de enorme trascendencia, que empezĂł el pasado domingo 13 de marzo con la renovaciĂłn de la totalidad de la Cámara de Diputados y de Senadores, y continĂşa con la elecciĂłn presidencial del prĂłximo 29 de mayo. Si la persona que resulte ganadora no consigue una mayorĂa absoluta, se celebrará una segunda vuelta presidencial el 19 de junio.
Esto significa que en espacio de tres meses, se renovarán el legislativo y ejecutivo nacional, en un paĂs que histĂłricamente, y por distintas razones, tiende a la abstenciĂłn electoral. Mientras que este año la participaciĂłn en las legislativas alcanzĂł el 47% del padrĂłn electoral, en las legislativas de 2018 fue del 49%, y en 2014, del 44%.
Entre las razones que brindan algunos estudios para explicar el fenómeno de la abstención, están la falta de apoyo a la democracia y la desconfianza en las instituciones. De hecho, de acuerdo al informe de Latinobarómetro de 2021, solo un 43% de los colombianos considera que la democracia es preferible a cualquier otra forma de gobierno.
Sin embargo, de acuerdo al mismo estudio, las y los colombianos valoran positivamente sus organismos electorales. Mientras que en promedio, en América Latina el 31% tiene confianza en la institución electoral, en el caso de Colombia llega al 54%.
Esto no quiere decir que las organizaciones polĂticas compartan esta impresiĂłn. Es por ello que los organismos electorales están obligados a innovar permanentemente sus procedimientos para hacerlos más transparentes, auditables y confiables.
En este sentido, para el proceso de este año, la RegistradurĂa Nacional del Estado Civil (RNEC) y el Consejo Nacional Electoral incorporaron soluciones tecnolĂłgicas en las fases de autentificaciĂłn del votante y de transmisiĂłn de datos.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) introdujo un nuevo software para la transmisiĂłn y seguimiento de los resultados, con el fin de acelerar su publicaciĂłn y facilitar su verificaciĂłn.
El programa es propiedad del CNE (comprĂł los derechos) y dispone de una modalidad de auditorĂa y fiscalizaciĂłn en tiempo real. SegĂşn indicĂł el registrador Alexander Vega, con este nuevo software las y los ciudadanos, los partidos polĂticos y las organizaciones civiles pudieron “vigilar cada movimiento de los sufragios” y hacerles “seguimiento continuo”.
La organizaciĂłn electoral colombiana estableciĂł un proceso de preconteo, que tiene un valor informativo (no jurĂdico), y consiste en la contabilizaciĂłn de los votos y la transmisiĂłn de la informaciĂłn vĂa telefĂłnica para facilitar la rápida divulgaciĂłn de los resultados. Esto genera, entre otros efectos, desincentivar las encuestas a boca de urna.
Por otro lado, el escrutinio oficial consiste en la digitalizaciĂłn y transmisiĂłn de los datos desde los Jurados de VotaciĂłn a las diferentes Comisiones Escrutadoras (Municipal, Departamental y Nacional) para su revisiĂłn por departamento, municipio y mesa.Â
Una vez realizados los procesos anteriores se procede a la consolidaciĂłn y reparto de las bancas (en el caso de las elecciones legislativas), y se emiten los resultados electorales por circunscripciĂłn.Â
El software descripto permite hacer consultas y filtrar la información por zona geográfica o por estados de mesa (en reclamación, con resoluciones, con requerimiento de atención, etc.), lo que ayuda a agilizar la verificación del escrutinio, las impugnaciones y resolución de las impugnaciones.
Esta tecnologĂa tambiĂ©n es usada en otros paĂses de la regiĂłn. En Argentina, desde 2019 se implementĂł la modalidad de digitalizaciĂłn y transmisiĂłn desde los centros de votaciĂłn, lo que agilizĂł en un 70% el escrutinio provisorio de 2021 y 2019 respecto al de 2015. En 2015, para las 21:00 hs (3 horas despuĂ©s del cierre de las mesas) solo se habĂan procesado menos del 9 % de las actas; pero en 2019, ya con la nueva tecnologĂa desde los centros de votaciĂłn, a la misma hora se contaba con el 70,49 %, y se alcanzĂł el 80 % en las legislativas de 2021.
En el caso de las legislativas de Colombia, veinte minutos luego del cierre de las mesas la RegistradurĂa Nacional comenzĂł con los anuncios del preconteo de las elecciones. El primer boletĂn se informĂł con el 0,01 % de mesas procesadas; y cerca de las 8:00 pm (4 horas despuĂ©s del cierre) se emitiĂł el Ăşltimo boletĂn de la noche (NÂş 31) con el 90,96 % del proceso concluido a nivel nacional.Â
Cualquier persona podĂa acceder a la página de la RegistradurĂa Nacional o a la aplicaciĂłn mĂłvil “Elecciones Colombia 2022” y constatar la carga de los datos y seguir el preconteo de las votaciones al Senado de la RepĂşblica, Cámara de Representantes, Circunscripciones Transitorias Especiales de Paz (Citrep), las consultas populares interpartidistas y las actas de escrutinio de los jurados de votaciĂłn o formularios E-14 de cada una de las 112.009 mesas de votaciĂłn instaladas (110.758 en Colombia y 1.251 en el exterior).
Durante la jornada se reportaron algunos inconvenientes, entre estos, problemas para acceder a la plataforma digital de la RegistradurĂa en la que el electorado ubicaba sus centros y mesas de votaciĂłn.
Por otro lado, y con el objetivo de proseguir con la mejora del proceso electoral, la MisiĂłn de ObservaciĂłn Electoral de la OrganizaciĂłn de Estados Americanos (OEA) recomendĂł al CNE y a la RegistradurĂa realizar pruebas y simulacros a todos los sistemas que forman parte del proceso de preconteo y escrutinio, y los instĂł a capacitar a los usuarios sobre posibles incidentes con el sistema y cĂłmo solucionarlos.
Si bien el preconteo brinda informaciĂłn de manera ágil y prácticamente no presenta diferencias con el escrutinio oficial, no dejar de ser preliminar, dado que el valor jurĂdico lo tiene solamente el escrutinio.
En este estado de situaciĂłn, se vuelve necesario que la organizaciĂłn electoral evalĂşe el funcionamiento y celebre nuevos simulacros de cara a las elecciones presidenciales del 29 de mayo.
En un contexto de desconfianza, baja participaciĂłn electoral y polarizaciĂłn polĂtico-partidaria, la tecnologĂa en la transmisiĂłn de datos no solo brinda agilidad y certidumbre sino que permite a los partidos polĂticos y a la ciudadanĂa en general tener un respaldo con trazabilidad de las actas, mejorando la auditabilidad; aquello que Guillermo O´Donnell tan bien acuñó con el tĂ©rmino accountability puede adoptar mucho más vigor.