Se utilizarán 1.700 millones de Derechos Especiales de Giro y, el resto, se pagará en yuanes de libre disponibilidad del swap de monedas con el Banco Popular de China.

El Gobierno argentino pagará este viernes al Fondo Monetario Internacional (FMI) US$ 2.700 millones, que estarán integrados en parte con Derechos Especiales de Giro (DEG), la moneda que utiliza el organismo multilateral, y otra con yuanes de libre disponibilidad, informó la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti.

De esta manera, «se cumple con lo que se acordó con el Fondo y al mismo tiempo no se pondrán en riesgo las reservas del Banco Central», dijo la funcionaria durante una conferencia de prensa en Casa Rosada.

Se utilizarán 1.700 millones de DEG y, el resto, se pagará en yuanes de libre disponibilidad del swap de monedas con el Banco Popular de China.

Esto permitirá no usar dólares de las reservas del Banco Central y, al mismo tiempo, mantener al día los pagos al organismo multilateral mientras avanzan las negociaciones en las que se busca reformular el programa acordado en marzo de 2022. El FMI recibiría los yuanes, que podría intercambiarlos por DEG al Banco de China, o bien a otro país miembro que necesitara yuanes para realizar transacciones.

«Estamos terminando de saldar el semestre, o los dos trimestres, con el Fondo, dejé al equipo trabajando. En las próximas horas se va a conocer públicamente cómo es el programa para los próximos seis meses», indicó Sergio Massa

El pago corresponde a dos vencimientos, ocurridos el miércoles y jueves de la semana pasada, fechas inicialmente previstas para abonar al organismo US$ 921 millones y US$ 1.780 millones, respectivamente, aunque el Gobierno consiguió el aval del Fondo para cancelarlo de este modo, a la espera del avance en las negociaciones.

Además continúan las conversaciones correspondientes a la quinta revisión del acuerdo de Facilidades Extendidas y que, en base al programa existente, la Argentina recibiría unos 3.000 millones de DEG -equivalentes a casi 4.000 millones de dólares- en caso de obtener el aval del organismo.

El objetivo del Gobierno es que el desembolso sea mayor a ese monto -de al menos el equivalente a fondos de lo que restan en el semestre, por unos US$ 10.600 millones- para ayudar a paliar el fuerte impacto de la sequía en las reservas internacionales en poder del Banco Central.

Con información de Télam