La Cámara de Diputados votó a favor del veto de Javier Milei a la Ley de Financiamiento Universitario, una ley que había sido aprobada por la misma cámara, y por la del Senado con amplia mayoría.

Esta reglamentación declaraba la emergencia presupuestaria del sistema universitario nacional para el año 2024.

La Cámara de Diputados dejó firme este miércoles el veto presidencial a la ley de financiamiento universitario, al no haber obtenido la oposición los dos tercios necesarios para mantener la iniciativa que había sido aprobada por el Congreso.

De esta forma, el Gobierno de Javier Milei logró que la Cámara de Diputados sostenga el veto presidencial.

La votación terminó con 160 votos a favor, 84 y 5 abstenciones. La oposición no consiguió reunir los votos para insistir con la normativa que brindaba fondos para las casas de estudio.

El PRO, sectores dialoguistas y La Libertad Avanza apoyaron el veto de Milei, además de tres diputados radicales y tres tucumanos de Independencia, que responde al gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo. Por otra parte, Unión por la Patria, la izquierda, buena parte de la UCR y la Coalición Cívica lideraron la oposición.

También pidió votar el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, haciendo uso de un artículo que le permite participación de una votación.

Dado que el 85% de los docentes se encuentra bajo la línea de pobreza, la norma proponía actualizar las partidas del Presupuesto 2023, que ya fue prorrogado este año por el Gobierno de Javier Milei, para que se amolde a la inflación acumulada.

Con este veto se pone en riesgo el funcionamiento futuro de la universidad pública argentina.

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