Simples pasos tales como revisar las pérdidas en las cañerías o cerrar las canillas cuando no se usan ayudarán a extender la vida útil de este recurso fundamental para el desarrollo de la vida en el planeta.

El uso del agua a nivel global sufrió un gran incremento durante el último siglo, y con un consumo acelerado, el mundo se enfrentará a un déficit mundial del 40% para 2040. (Unesco).

En Argentina la pérdida por fugas desde que el agua sale de la planta potabilizadora hasta que llega a nuestros hogares, equivale al 40%. Agua que, si se lograra ahorrar, abastecería a millones de habitantes de zonas urbanas.

El agua es un bien escaso, fundamental para la sostenibilidad y reproducción de la vida en el planeta. La demanda de este recurso natural genera cada vez más problemas en todo el mundo. El uso del agua en el mundo se ha multiplicado por seis durante el siglo pasado y se espera que su demanda continúe creciendo. Tal es así que, de acuerdo con datos de las Naciones Unidas, si su consumo continúa incrementándose, los humanos se enfrentarán a un déficit mundial de agua del 40% para 2040.

Solo por citar un ejemplo, se estima que el consumo diario por persona es de 80 litros. Sin embargo, en el ámbito de la concesión de Aguas Bonaerenses, se consumen, en promedio, 300 litros diarios por persona. En Argentina la pérdida por fugas desde que el agua sale de la planta potabilizadora hasta que llega a nuestros hogares, equivale al 40%. Agua que, si se lograra ahorrar, abastecería a millones de habitantes de zonas urbanas.

Es por ello que debemos prestar atención a posibles averías y ser conscientes del caudal de agua que implican ciertas actividades.

  • Una canilla abierta vierte entre 6 y 7 litros de agua por minuto.
  • Una canilla que gotea desperdicia 12 mil litros de agua anuales.
  • Con un tanque de inodoro que pierde agua se pueden desperdiciar entre 34 mil y 80 mil litros por año.
  • Las piletas de material tienen entre 50 mil y 70 mil litros de capacidad de agua.
  • Las piletas de lona contienen entre 5 mil y 10 mil litros de agua.

Ante esta situación, ¿que podemos hacer desde nuestras casas para cuidar uno de nuestros recursos naturales más valiosos? Disfrutar de una pileta es ideal para pasar el verano, pero requiere de muchos litros de agua. Cuidarla con cloro y reguladores de PH para reducir su consumo y evitar recambios de agua.

Los días de calor invitan a lavar el auto. Para ahorrar hasta la mitad de agua, se sugiere usar hidrolavadora, manguera con boquilla de cierre o sino hacerlo directamente con un balde.
Regar las plantas en las horas de menor calor, así el agua se filtra mejor en la tierra, ya que los rayos del sol, la evaporan más rápido.

Disminuir el tiempo de la ducha y priorizar su uso por sobre la bañera es muy importante para el ahorro del agua. Para hacerlas lo más cortas posibles podés elegir tu canción favorita de 5 minutos, que te sirva como temporizador.

Regular la intensidad del chorro de agua no abriendo siempre al máximo la canilla. Cerrar la canilla mientras se lavan los platos, los dientes o las manos. Verificar que no goteen. Sólo abrirla al momento de enjuagarlos. Así, ahorras 1 litro de agua cada diez segundos.

Utilizar el lavarropas y lavavajillas con la carga completa para ahorrar agua. Podés acumular la mayor cantidad de ropa posible para cada lavado en lugar de hacer varios lavados con poca ropa.
Aprovechar el agua de lluvia o el desechado por los aires acondicionados para regar las plantas, principalmente las de interiores.

No usar el inodoro como tacho de basura. No sólo porque cada descarga consume una gran cantidad de agua, sino que además todos los residuos desechados son contaminantes y pueden ser peligrosos.
Revisar siempre que las cañerías o tanques de la casa no tengan pérdidas. De tenerlas, llamar a un plomero lo antes posible para que lo solucione.