La anemia infecciosa es una enfermedad frecuente en los gatos. Aunque hay diferentes maneras de que puedan contagiarse, una de las más comunes es a través de las pulgas.
Los argentinos tienen un gran amor por los gatos, se estima que hay alrededor de 6 millones en el país, convirtiéndose en uno de los animales de compañía más populares. Por eso, en el marco del Día Internacional del Gato, es importante recordar los cuidados regulares que hay que tener para evitar enfermedades como la provocada por el Mycoplasma haemofelis, también conocida como anemia infecciosa felina, una afección muy frecuente pero fácil de prevenir.
¿De qué se trata esta enfermedad y cómo prevenirla?
Aunque no haya estadísticas oficiales, es una enfermedad infecciosa que se encuentra en todo el mundo y puede afectar a gatos de todas las edades y razas. Para entender mejor de qué se trata esta afección, la anemia por hemoplasmas felinos se manifiesta cuando el gato experimenta trastornos sanguíneos debido a la presencia de Mycoplasma haemofelis, una bacteria indeseada. Se podría describir como un intruso microscópico que decide instalarse en los glóbulos rojos del gato, esenciales para el transporte de oxígeno por todo su cuerpo. Este inquilino no invitado puede causar estragos, dañando estas células de la sangre y llevando a la ruptura de algunas de ellas. En un intento de autodefensa, el sistema inmunológico del gato entra en acción, pero a veces, en su combate contra este intruso, termina destruyendo más glóbulos rojos de lo necesario. Esta serie de eventos puede generar malestar en el gato, afectando su vitalidad y bienestar general.
¿Cómo se transmite esta enfermedad?
Hay diferentes maneras de que puedan contagiarse, una de las formas más comunes es a través de las pulgas. Los hemoplasmas pueden causar anemia hemolítica, pero la gravedad varía mucho. La mayoría de los animales desarrollan infecciones asintomáticas, con anemias agudas más graves y, una vez que el gato porta la bacteria, el tiempo de detección y diagnóstico es clave.
Para evitar esto, el camino es la prevención. Walter Comas, Director de la Unidad de Negocios de Animales de Compañía para MSD Salud Animal Argentina, brinda algunas recomendaciones para cuidar la salud de los gatos:
- Llevar los gatos a chequeos veterinarios periódicos para detectar la enfermedad en sus primeras etapas.
- Mantener a los gatos libres de parásitos externos con soluciones eficientes y de protección duradera, que permitan el mayor cuidado del animal. Existen algunas soluciones que duran hasta 12 semanas.
- Controlar el contacto de los gatos con otros gatos infectados o de origen desconocido.
- No automedicar al gato.
- Mantener una buena higiene del hogar y de las áreas donde los gatos pasan tiempo, como los areneros y los juguetes, para prevenir la proliferación de bacterias y parásitos.
Además, hay que tener en cuenta que los gatos que viven en áreas con una alta concentración de pulgas y garrapatas tienen un mayor riesgo de contraer la enfermedad. Los estudios epidemiológicos en algunas regiones han mostrado tasas de infección variable, por ejemplo: En países como Asia, los gatos semi domesticados presentan una tasa de infección más elevada que los gatos con dueño, ya que al estar expuesto a artrópodos chupadores de sangre y ser más propensos a peleas con otros gatos son más susceptibles a contraer la enfermedad en comparación con los gatos de interior. Sin embargo, es esencial destacar que la enfermedad puede afectar tanto a gatos domésticos como a gatos callejeros.
“Es importante cuidar a los gatos de manera constante para evitar que se contagien de pulgas y limitar sus salidas para prevenir peleas con otros animales. Además, hay que destacar que los gatos que están infectados no deben ser utilizados como donantes de sangre porque pueden contagiar a otros animales de forma directa” explica nuevamente Walter Comas.
Celebrar el Día Internacional del Gato no solo implica mimarlos con caricias y juguetes, sino también asegurarnos de que gocen de una salud óptima. Al tomar medidas preventivas y estar alertas a posibles síntomas, podemos garantizar que estos amigos de cuatro patas disfruten de una vida plena y saludable.