Este miércoles por la mañana dio comienzo la jornada “Acceso a la Justicia. A un año de ATAJO en Río Cuarto”. El acto de apertura tuvo lugar en el Aula Magna de Agronomía y Veterinaria y fue presidido por el rector de la Universidad, Roberto Rovere.

La jornada es organizada por el Observatorio de Derechos Humanos de la UNRC, la Defensoría del Pueblo de la Ciudad y de la Provincia de Córdoba y el Programo ATAJO local.  Acompañado en el estrado por el vicerrector, Jorge González, y por el defensor del Pueblo de Río Cuarto, Ismael Rins, el rector expresó la conveniencia de realizar un “balance” a un año de la implementación del programa al que en la ciudad se sumó la UNRC y que procura llevar la justicia a los sectores que no la tienen a mano o que solo la conocen desde su faz penal.

Rovere agradeció la labor del Observatorio de Derechos Humanos de la Universidad Nacional de Río Cuarto y expresó que sería valioso “replicar en otros sectores todo lo que se viene haciendo en el barrio Malvinas”. Apuntó que, “pese a ser un programa nacional”, ATAJO “no recibe aquí presupuesto de la Nación”, por lo cual se lleva adelante con el esfuerzo de cada uno de los que participamos.

En su gratitud al Observatorio, el rector apreció la caracterización que se ha hecho en el barrio Malvinas –cercano al puente del mismo nombre, extremo oeste de la ciudad-. Señaló que fue desplegada merced a los aportes de profesionales tales como “abogados, sociólogos, psicólogos y trabajadores sociales”. En tren de favorecer el acceso a la justicia de ciudadanos “vulnerados”, “tener personas en el lugar” facilita conocer de primera mano problemáticas del orden de “consumo de drogas y violencia de género” o por “falta de agua y de energía”.

Rovere manifestó con realismo que “la información” es útil para sumar “propuestas con aspectos técnicos para solucionar problemas, aunque no todos”. Y apuntó que “como universidad tenemos responsabilidad social frente a esto”, por eso “llevamos a cabo una labor conjunta con organizaciones e instituciones”.

En este contexto, desde el mediodía hay debates y reflexiones respecto del acceso a la justicia para las personas en situación de vulnerabilidad de Río Cuarto analizando el desarrollo y la proyección del dispositivo a un año de su instalación en nuestra ciudad. Se comparten experiencias y desafíos de los actores involucrados en ATAJO en la ciudad.

A modo de adelanto, Rins afirmó que “es preocupación de la Defensoría del Pueblo acercar la justicia a sectores que ni siquiera saben dónde queda Tribunales” o que desconocen que “el Estado les tiene que proveer un abogado de oficio”.

No todos iguales ante la ley
En la inauguración de la jornada, también consideró “muy importante esta evaluación a un año de trabajo articulado” entre la UNRC, la Defensoría del Pueblo y el Ministerio Público Fiscal. Con el empeño de cada uno se propende a “una justicia más justa” a la “que todos puedan acceder. Por eso fuimos a trabajar al barrio Malvinas”. Su diagnóstico fue elocuente: “Se palpa en Río Cuarto que hay que tener dinero para acceder a la justicia”, se ha hecho “una costumbre”. De ahí su reivindicación de dispositivos como ATAJO para a quienes hoy la justicia les resulta tan cercana como la Muralla China la encuentren próxima en el futuro.

Entre los presentes en el Aula Magna estuvieron el secretario de Planeamiento y Relaciones Institucionales de la Universidad, Jorge Guazzone; la responsable del Observatorio de Derechos Humanos, Mirta Aromataris; el coordinador del Consejo Social, Manuel Schneider, y el decano de Ciencias Humanas, Fabio Dandrea.

Fuente: Dirección de Prensa y Difusión UNRC