Visitamos la Defensoría del Pueblo de Río Cuarto, en este recorrido periodístico para dar a conocer el funcionamiento de instituciones claves en la vida de la ciudad.

La Defensoría del Pueblo cumple con la tarea eminentemente práctica, basada en las necesidades y preocupaciones de los ciudadanos, de este modo, se establece como nexo entre estas necesidades del vecino y la estructura de gobierno, constituyéndose en un puente que pretende acortar las distancias entre los habitantes de la Ciudad y sus gobernantes.

Las áreas que la componen son Defensa del Consumidor, con el objetivo de garantizar que se respeten los derechos de todos los habitantes en materia de consumo, previstos a nivel nacional, provincial y local; Salud e Integración Social, Orientación Jurídica, Mediación Comunitaria, Observatorio Socio Ambiental, que tiene como tarea entregar capacitación a las comunidades tendiente a empoderarlas en la defensa de su medio ambiente.

También el área de Derechos Humanos y Diversidad Sexual, Servicios Públicos y área de Mujer a través de la cual se desarrollan acciones para visibilizar, concientizar, promover los derechos de las mujeres, prevenir sobre violencia de género, motivar la generación de políticas públicas con perspectiva de género, atención, orientación jurídica y acompañamiento a mujeres víctimas de violencia.

“La Defensoría ha tenido un gran desarrollo dentro de estos 22 años, somos una de las defensorías más antiguas de la Argentina, nos gana creo que solamente la de San Juan, ha venido cultivando un prestigio muy importante, y recién veíamos una estadística de cómo la gente de los pueblos de Río Cuarto viene a la defensoría no solamente porque tiene un problema ligado con la ciudad, sino que también nos plantea problemas que exceden los límites territoriales de la ciudad”, dijo Ismael Rins, Defensor del Pueblo.

En cuanto a los objetivos que se plantearon desde el equipo de trabajo, Rins explicó que “la verdad siempre soy muy crítico, si te digo que hemos cumplido no me siento del todo conforme, me parece que falta mucho más, tenemos que hacer mucho más, uno cuando ve el equipo que ya estaba trabajando en la defensoría, le da muchas más ganas de dar más, el equipo da, tener esa sensación que se puede es muy interesante, sin lugar a dudas que hemos cumplido algunas etapas como abrir el Observatorio Socio Ambiental que no se estaba tratando, el área de género, nos parecía que la defensoría no podía quedar ajena a la problemática”.

Cabe destacar el vínculo permanente con otras instituciones como lo es la Universidad Nacional de Río Cuarto, creando un sistema de alianzas importante. “Hemos hecho alianzas con la Universidad trabajando en distintas áreas como el Observatorio de Migrantes, con el Concejo Deliberante que también se sumó a ese observatorio, que es gestionar la cuestión de la migración en Río Cuarto y la zona, donde ya tenemos por ejemplo más de 50 familias venezolanas en la ciudad, esto es bueno conocerlo para poder gestionar ámbitos para el acogimiento de estas familias”, comentó Rins.

Respecto de los ejes de trabajo de este año, el defensor del pueblo resaltó la regulación sobre el incremento de los servicios públicos, los servicios de salud, de discapacidad, y en función de las problemáticas sociales, comentó que “todos los problemas son sociales, porque la salud tiene que ver con lo social, también la vivienda, son derechos sociales, de todos los que habitamos la ciudad, a veces se pueden cumplir, a veces no”.  En esto destacamos los programas Mejor Saber y Más Cerca, con una fuerte impronta preventiva.

Para concluir, reflexionó sobre el aniversario de la ciudad. “Uno siente con mucha pasión la función pública, es una ciudad que nos abriga a todos los riocuartenses, y nos da esa sensación que nos conocemos todos, nos cruzamos la calle, nos saludamos, estamos siempre enmarcados dentro de un ámbito de la ciudad de mucha cercanía y esto creo que es el valor que tiene Río Cuarto”, finalizó Ismael Rins, Defensor del Pueblo de Río Cuarto.

Redacción La Ribera